los esclavos africanos.
La esclavitud en la Nueva España estuvo basada en la importación de esclavos negros de África para trabajar en la colonia en las enormes plantaciones, ranchos o zonas mineras del virreinato, pues su consistencia física los hacía aptos para trabajar en zonas cálidas.
En 1517 Carlos V estableció un sistema de concesiones por el cual sus súbditos de América podían usar esclavos, con lo que comienza el infame negocio de esclavos.
Una Bula promulgada por el PapaUrbano VIII el 22 de abril de 1639 prohibió la esclavitud en las colonias de España y Portugal en América. La medida fue aprobada por el Rey de EspañaFelipe IV sobre los indígenas, pero permitió la esclavitud de los esclavos africanos. Muchos de éstos esclavos, conocidos como Cimarrones consiguieron su libertad al escaparse y refugiarse en las montañas, sobre todo en la porción actual de lo que es el estado de Veracruz.
Además de los indígenas y los españoles, los africanos constituyen la tercera raíz de la sociedad mestiza de México y que tiene su origen en Nueva España. Los intercambios comerciales internacionales de aquel periodo no se reducían solo a productos, sino también incluyeron a las propios humanos. África se convirtió en el continente abastecedor de esclavos para el mundo. Es así que la población africana llega a Nueva España en calidad de esclava para ser empleada en los trabajos más pesados, ante la reducción de la población indígena producida por las catástrofes demográficas extracción de personas de África en calidad de esclavos también cotribuyó a una de las cátastrofes registradas en la historia moderna si consideramos que de las millones de personas que salieron de África como esclavos, muchos de ellos morirían en el trayecto por las condiciones inhumanas en las que eran trasladados y los que lograban sobrevivir eran obligados a realizar trabajos pesados en la agricultura y la ganadería en las mismas condiciones.
Los esclavos provenientes de África fueron vistos como una forma de resolver la demanda de trabajo. En 1521 los africanos en Nueva España no rebasaban la docena y ya para 1570 había cerca de 20 000; en 1646 ascendían a más de 35 000, aunque la población descendió y para 1810 eran alrededor de 10 000 individuos distribuidos principalmente en las costas y zonas tropicales. Fueron destinados a cultivos como el de la caña de azúcar.
En 1517 Carlos V estableció un sistema de concesiones por el cual sus súbditos de América podían usar esclavos, con lo que comienza el infame negocio de esclavos.
Una Bula promulgada por el PapaUrbano VIII el 22 de abril de 1639 prohibió la esclavitud en las colonias de España y Portugal en América. La medida fue aprobada por el Rey de EspañaFelipe IV sobre los indígenas, pero permitió la esclavitud de los esclavos africanos. Muchos de éstos esclavos, conocidos como Cimarrones consiguieron su libertad al escaparse y refugiarse en las montañas, sobre todo en la porción actual de lo que es el estado de Veracruz.
Además de los indígenas y los españoles, los africanos constituyen la tercera raíz de la sociedad mestiza de México y que tiene su origen en Nueva España. Los intercambios comerciales internacionales de aquel periodo no se reducían solo a productos, sino también incluyeron a las propios humanos. África se convirtió en el continente abastecedor de esclavos para el mundo. Es así que la población africana llega a Nueva España en calidad de esclava para ser empleada en los trabajos más pesados, ante la reducción de la población indígena producida por las catástrofes demográficas extracción de personas de África en calidad de esclavos también cotribuyó a una de las cátastrofes registradas en la historia moderna si consideramos que de las millones de personas que salieron de África como esclavos, muchos de ellos morirían en el trayecto por las condiciones inhumanas en las que eran trasladados y los que lograban sobrevivir eran obligados a realizar trabajos pesados en la agricultura y la ganadería en las mismas condiciones.
Los esclavos provenientes de África fueron vistos como una forma de resolver la demanda de trabajo. En 1521 los africanos en Nueva España no rebasaban la docena y ya para 1570 había cerca de 20 000; en 1646 ascendían a más de 35 000, aunque la población descendió y para 1810 eran alrededor de 10 000 individuos distribuidos principalmente en las costas y zonas tropicales. Fueron destinados a cultivos como el de la caña de azúcar.